Los problemas más importantes que tenemos son la privacidad y el control sobre el contenido. Hacemos uso excesivo de las comunicaciones sin tener en cuenta la privacidad del usuario, y toda la información que metemos sobre nosotros o sobre los que nos rodean quedan en manos de los propietarios de la red social.
Todos sabemos que Internet genera problemas y también beneficios. No debemos dar datos de carácter personal como: números de teléfono, domicilio, fechas de nacimiento, contraseñas, imágenes de terceros sin su consentimiento y tener mucho cuidado con las imágenes que pongamos de nosotros.
Poner demasiada información personal puede facilitar la suplantación de personalidad, nos afecta a nosotros y a nuestros amigos. No debemos acceder desde cualquier ordenador a nuestra cuenta, ya que el password se puede quedar grabado en la memoria caché del equipo.
En definitiva, tenemos que hacer una práctica normal de las redes sociales y tener un poco de sentido común, sobre todo, tener cuidado con la privacidad de cada uno y, por supuesto, con la de los demás.
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