Esta obsesión de suicidio me está matando.
No más medios de comunicación, los queremos completos.
Si no eres parte de la solución, eres parte del problema.
Fallar es humano, pero echarle la culpa a otro es más humano todavía.
Lo importante no es saber, sino tener el teléfono del que sabe.
Yo no sufro la locura, la disfruto cada minuto.
Si yo fuera tú me enamoraría de mí.
La vida es como un moco: intragable, dura y a veces no te deja respirar.
Sonríe, yo existo.
El dinero no hace la felicidad, la compra hecha.
La inteligencia me persigue pero yo soy más rápido.
Cualquiera se puede equivocar, inclusive yo.
La verdad absoluta no existe, y esto es absolutamente cierto.
Ningún tonto se queja de serlo. No les debe ir tan mal.
Estudiar es desconfiar de la inteligencia del compañero de al lado.
Si un pájaro te dice que estás loco, debes estarlo pues los pájaros no hablan.
El mundo se está quedando sin genios: Einstein se murió, Beethoven se quedó sordo, y a mí me duele la cabeza.
Lo triste no es ir al cementerio sino quedarse.
Lo importante no es ganar sino hacer perder al otro.
Si quieres una mano que te ayude, la encontraras al final de tu brazo.
Álvaro S.
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