Hace unas semanas tuvo lugar un debate acerca de la globalización, que mi equipo perdió, lamentablemente (he de decir que tuve parte de culpa, dado que apenas tuve tiempo de preparármelo). Sin embargo quiero reflexionar sobre el objetivo del debate en sí. Mucha gente dice que la globalización, el progreso, suponen una mejora para el mundo, un paso adelante. Yo pregunto: ¿La innovación que supone la fabricación del Iphone 5 justifica que la manufactura la lleven a cabo 10.000 niños menores de 12 años en Mongolia? ¿Justifica la obtención de energía que se viertan residuos nucleares al mar? Yo creo que no. Puede que el fin que se persigue sea bueno (no siempre se da el caso) pero muchas veces los medios empleados dejan bastante que desear. ¿Estamos dispuestos a vender nuestra alma por el progreso? Entonces no será progreso, sino retroceso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario