Es una persona que te transmite muchas cosas, como persona yo lo veo como un hombre con mucha moderación, austeridad, mesura, comedimiento, contención, sencillez, prudencia, seriedad y formalidad, es decir, con sobriedad.
A su vez también vemos que es muy culto, sabe de casi todos los temas y siempre está pendiente de todas las noticias que se dan en el mundo para tener suficiente información cuando las aprueba o desaprueba, además intenta hablar el mayor numero de idiomas posibles para que todos los fieles se sientan identificados con Él.
A mí personalmente me transmite mucha serenidad, tranquilidad, felicidad, paz interior, me hace reflexionar. Solo me vale con mirarle, no hace falta que diga ni una palabra. Esa es la fuerza y la paz que no transmite el Papa.
El Papa no nos deja, según sus propias palabras; quiere dedicarse más a la oración y a la meditación: ''El señor me ha llamado a subir al monte (Tabor) para dedicarme aún más a la oración y a la meditación, lo que haré de un modo más adecuado a mi edad y fuerzas. No abandono la Iglesia''.
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