Esta entrada va dirigida a aquellas personas que se indignan ante las maldades y las injustancias que otros cometen. Tú, que te indignas cuando un político es condenado por fraude, ¿no eres el primero que copia en un examen si tiene la oportunidad? Tú, que te enfadas cuando alguien soborna, ¿no eres el primero que va en metro sin pagar? Con estos ejemplos no quiero decir que tus "delitos" sean iguales (al contrario, no tienen nada que ver) sino que una cosa lleva a la otra. ¿Crees que el ladrón de joyas empezó directamente? Claro que no, empezaría robando paquetes de chicles, luego camisetas y más tarde videojuegos, hasta pasar a joyerías o viviendas particulares.
A lo mejor el que copies en un examen te parece una tontería, pero esa tontería puede condicionar tu futuro. Aquellos que se quejan de corrupción, si no desarrollan la honradez y la integridad desde niños, caerán también. Acabo con una de las frases más ciertas que he oído nunca. "Todo el mundo piensa en cambiar la humanidad, pero nadie piensa en cambiarse a sí mismo". Guerra y Paz (Tolstói)
Jaime.M
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